lunes, 23 de marzo de 2015

DOS DÍAS, UNA NOCHE



Nacionalidad: Bélgica (2014)
Directores: Jean-Pierre Dardenne, Luc Dardenne
Guión: Jean-Pierre Dardenne, Luc Dardenne

Crítica


2 días y una noche nos obliga necesariamente a echar un vistazo atrás y revisar la filmografía de los hermanos Dardenne y su particular forma de observar y mostrar la realidad social.

En el año 1999 se colaban por primera vez en el festival de Cannes con su Rosetta, obteniendo la Palma de Oro, tanto a la mejor película, como para su joven actriz, Émilie Dequenne. La película trata un drama social, abordando la vida de una adolescente de 17 años cuya existencia, encadenada a una madre alcohólica y a una caravana, nada entre la desesperanza de la ineficacia de los subsidios sociales y la imposibilidad de conseguir un contrato laboral. Plagada de primeros planos de la joven Dequenne (impresionante actuación) y una cámara al hombro, cuyo balanceo enfatiza la angustia y desesperanza de la joven, los hermanos Dardenne daban a conocer al gran público su particular forma de entender el cine social. Un cine desnudo de atrezos, maniqueos o moralina innecesaria, que no buscaba  la denuncia explícita, sino calar en la psique de los espectadores para acaso turbar su aburguesada y adormecida conciencia. Esta firma y sello personal de los Dardenne se mantendría incólume en sus siguientes películas.

En el año 2002 nos sorprendían con otra pequeña joya, Le fils (El hijo), y su maestría para situarnos en una circunstancia en la que no querríamos estar, en una dicotomía moral no elegida, pero a la que nos sentimos obligados a asistir. Nuevamente con planos cortos, cámara danzante y ausencia de banda sonora, más allá de la propia de la escena, la cinta relata la relación entre un carpintero (Olivier) y un joven (Francis) recién salido del reformatorio que comienza su formación en su taller. Entre ellos se esconde un terrible secreto relacionado con el hijo fallecido de Olivier que dirimirá el contenido dramático de la película.

domingo, 4 de mayo de 2014

ANTES DEL AMANECER

Nacionalidad: Estados Unidos (1995)
Director: Richard Linklater
Guión: Richard Linklater, Kim Krizan

Crítica
                                                            
Cerrado recientemente el espléndido ciclo iniciado por Richard Linklater (con Before Midnight, 2013), quizá sea el momento de rescatar esa pequeña joya que en 1995 nos regaló este mismo director bajo el título de Before Sunrise (Antes del Amanecer).

Before Sunrise es una de esas cintas que uno comienza a ver esperando encontrarse una película romántica más. Sin embargo, y a pesar de la cursilería de las carátulas que podamos encontrar aparejadas a ella, desde el comienzo, y a medida que uno va adentrándose en su metraje, va descubriendo un trabajo de orfebrería cinematográfica de extrema calidad, cuyos elementos - guión, actuaciones, cámara, montaje, fotografía y música  - se conjugan con sutileza para acabar deleitando incluso al paladar más exigente.

Antes del amanecer es la historia de amor que todos desearíamos haber vivido, cuya belleza, realismo y credibilidad consigue su magia gracias a una serie de aderezos como son la improbabilidad de lo fortuito (se conocen en un tren); la intensidad de lo efímero (todo sucede en una noche); un telón de fondo de ensueño (Viena); y, sobre todo, gracias a unos diálogos cuya imaginativa frescura e inteligencia te atrapan y te hacen cómplice de la química que desbordan los dos jóvenes protagonistas. En esta película uno no siente que esté viendo a Ethan Hawke, sino a Jessi, un joven estadounidense, alegre, culto y reflexivo, que desprende un cierto escepticismo racional hacia aspectos existencialistas del ser humano. Tampoco se percibe a la actriz, Julie Delpy, sino que en todo momento tenemos la sensación de estar contemplando a Celine, una inteligente, despierta y cultivada joven francesa, cuyos pilares racionales entran en ocasiones en conflicto con su naturaleza soñadora. A lo largo de la película, ambos jóvenes nos deleitan con una serie de lúcidas e ingeniosas conversaciones que ahondan, desde la perspectiva que se puede tener a su joven edad, en los insondables enigmas que rodean al ser humano (el amor, las relaciones entre hombres y mujeres, la muerte, la religión, la necesidad o no de lo irracional como vía de escape, etc). La complicidad que manifiestan ambos jóvenes será cada vez mayor, descubriendo, como uno puede descubrir en una noche una bella ciudad, cuáles son sus anhelos, sus miedos o sus sueños, despertándose entre ellos un sentimiento que irá creciendo cada vez más. ¿Puede tan sólo una noche ser tiempo suficiente para saber que esa persona es el amor de tu vida? A lo largo de los poco más de cien minutos que dura la cinta acompañaremos a Celine y Jessi por su paseo nocturno vienés y reiremos sus ocurrencias, reflexionaremos desde su intelectualidad y nos emocionaremos con las situaciones que vivirán. Con cada tímida sonrisa, cada esquiva  y nerviosa mirada, cada caricia o beso, sentiremos el amor que va creciendo entre ellos, y, sin darnos cuenta, egoístamente nos apropiaremos de él y lo haremos algo nuestro. Y es que, más allá de los aspectos que comentábamos al principio de esta crítica, el gran logro del director quizá sea éste, no hacer de Antes del Amanecer una simple película romántica, sino ser capaz de captar la esencia del amor puro y sincero y hacerlo cine.


Yo soy un ángel irreal,
un dechado de fantasía.
Quiero que sepas lo que pienso
y ya no lo tengas que adivinar.
No sabes de dónde procedo
ni sabemos a dónde vamos
Nos alberga la vida
como el río a las ramas
que fluyen aguas abajo
atrapadas en la corriente
Yo te llevo a ti, tú me llevarás a mí
Podría ser así
¿Es que no me conoces?


                                (Fragmento extraído del poema del Poeta-mendigo de la película) 


Valoración personal: 8

domingo, 23 de febrero de 2014

LA CAZA

Nacionalidad: Dinamarca (2012)
Director: Thomas Vinterberg
Guión: Thomas Vinterberg; Tobias Lindholm


Sinopsis


Lucas es una persona muy apreciada en la pequeña localidad danesa donde vive, tanto por los vecinos, como por los niños y los compañeros de la escuela infantil en la que trabaja como cuidador. Tras la ruptura de su matrimonio, poco a poco irá rehaciendo su vida gracias a sus amigos, al apoyo de su hijo y la estabilidad sentimental que encontrará junto a una compañera del trabajo. Toda esta incipiente armonía se vendrá abajo cuando, por un malentendido,  Klara, la hija de su mejor amigo, vierta contra él unas acusaciones infundadas que pondrán en alerta a la directora de la escuela. Lo que nacerá como una inocente mentira de la pequeña, se acabará convirtiendo en la desgracia para Lucas.

Crítica

Que el cine Danés está de enhorabuena no es ninguna noticia. Hasta pasada la mitad del siglo XX, el cine de Carl Theodor Dreyer se convertía en referente del cine europeo. Dreyer, con su devoción desmedida por la pureza y la calidad cinematográfica, así como por un realismo carente de atrezos y un interés por adentrarse en los enigmas del ser humano, definía con maestría el camino a seguir para las generaciones venideras. El testigo lo tomarían dos alumnos aventajados, Lars von Trier y Thomas Vinterberg, cofundadores en 1995, junto a Kristian Levring y Soren Kragh-Jacobsen, del revolucionario movimiento Dogma 95, que ponía nuevamente a Dinamarca en el punto de mira del panorama cinematográfico mundial.  Este movimiento dio alas a muchos otros cineastas que, asumiendo sus preceptivos mandamientos, decidieron iniciarse tras las cámaras, como es el caso se Susanne Bier, cuya larga carrera cinematográfica culminaría en el 2010 con el Óscar a la mejor película extranjera (Heaven). Paralelamente al movimiento Dogma, encontramos desde los 80 también el cine clasicista y tradicionalista de Bille August, exportador del buen hacer cinematográfico danés por festivales de todo el mundo. Muchos de estos directores continúan en activo hoy día, regalándonos a los amantes del buen cine la magia de su celuloide. Es el caso del director de la película que es hoy objeto de crítica: Thomas Vinterberg.

viernes, 14 de febrero de 2014

FIREFLY (Serie de TV)

Nacionalidad: Estado Unidos (2002)
Creada por: Joss Wheldon
Guión: Joss Whedon, Tim Minear, Ben Edlund, Jose Molina


Marilyn Monroe ....... 36 años
Kurt Cobain .............27 años
James Dean ............24 años
Jimi Hendrix ............27 años
John Lennon  ...........40 años
Bruce Lee................32 años
Heath Ledger ...........28 años
Bob Marley .............36 años
Jim Morrison ...........27 años
Freddie Mercury.......44 años
River Phoenix ..........23 años
Janis Joplin .............27 años
Elvis........................42 años
....
....
....
Firefly......................14 capítulos



Perdón por la "frikada"......


domingo, 26 de enero de 2014

AN EDUCATION

Nacionalidad: Reino Unido (2009)
Director: Lone Scherfig
Guión: Nick Hornby (Adaptación del libro homónimo de Lynn Barber)


Sinopsis

Nos encontramos en Londres, años sesenta. Jenny es una brillante estudiante de 16 años que, más allá de su deseo de realizar estudios universitarios en Oxford, no encuentra otros estímulos que llenen su vida. Sin embargo, todo cambiará cuando conozca a David, un seductor y vividor treintañero que la colmará de experiencias gracias a su acomodada situación social. Integrada en su sofisticado círculo social, Jenny tendrá que debatirse entre la responsabilidad que supone acabar sus estudios o dejarse llevar por la estimulante vida que le ofrece David.  

Crítica

Quizá el argumento de esta película pudiera antojársenos un mosaico de retales ya antes vistos. Sin embargo, la calidad del hilo utilizado, la finura de las costuras y la elegancia e inteligencia en la disposición de los mismos, es lo que la aleja de la trivialidad y la encaminó en el 2009, con paso firme, y engalanada con tres nominaciones, hasta la pasarela de los Óscar. Y es que en la cinta de la danesa Lone Scherfig la trama argumental no es la principal protagonista, sino más bien el hilo conductor sobre el que desplegar todo aquello que la directora quiere transmitir. Se trata, pues, de una película de personajes, en la que el sólido guión ejerce de sutil catalizador de emociones, sentimientos, frustraciones, alegrías, decisiones, errores y, en definitiva, de todo aquello que constituye la vida, pues qué duda cabe que es la propia vida la que nos depara las mejores y más importantes enseñanzas. Centrada en los años 60 británicos, magistralmente reconstruidos, y que nada deberían envidiar a lo ya visto en la excelsa Mad Men, asistimos a una época en la que la educación académica de la mujer quedaba relegada a un segundo plano ante la posibilidad de conseguir un marido de buena posición. Jenny (Carey Mulligan), con su brillantez, su pragmatismo y unos padres que la apoyan en su deseo de ir la universidad en Oxford, se presenta como una aventajada candidata a la excepción que confirma la regla. Sin embargo, su adolescente juicio se verá puesto a prueba ante la seductora personalidad de David (Peter Sarsgaard) y el excitante mundo de clubes de jazz y subastas de arte que frecuenta gracias a un dinero obtenido de dudosa fuente. ¿Cómo podría una chica de 16 años, enamorada de la música y la literatura francesa, rechazar a un hombre que le ofrece París?



La cinta de Scherfig respira honestidad y sencillez en el mensaje que quiere transmitir. La actual sociedad, pese a los progresos que aún quedan por dar en pos de la igualdad, se gestó en gran medida gracias a las mujeres que en esta época decidieron dar un paso adelante en busca de su propia individualidad. Una individualidad no entendida, y en cierto modo denostada por los convencionalismos sociales, que queda aquí ejemplificada mediante la profesora de lengua (Olivia Williams) y la directora del colegio (Emma Thompson), pilares aún vacilantes de esa nueva sociedad que estaba por venir. El personaje de Jenny se erige como compendio de todos aquellos adolescentes que, ajenos a lo que les pueda deparar el futuro, prefieren vivir el momento, un carpe diem que no comparte ni comprende la necesidad de una buena educación. Asimismo, aboga la directora por la importancia de los padres en la orientación de los jóvenes, pues lo que les depare el futuro, el bagaje cultural y académico que les ha de acompañar a lo largo de sus vidas, queda en gran medida dirimido por un periodo, la adolescencia, donde la voluntad queda subyugada a la inevitable inmadurez.

Gracias a una gran fotografía, un guión perfectamente adaptado por Nick Hornby (Alta fidelidad), una buena banda sonora y, especialmente, a unas espléndidas interpretaciones (destacando las actuaciones de Carey Mulligan y Alfred Molina, que ejerce de padre de Jenny), Lone Scherfig construye una película muy humana, cuyo poso reflexivo trasciende la época en la que se presenta, para hacer de su mensaje una exhortación atemporal.


Valoración personal: 7

domingo, 12 de enero de 2014

HUNGER

Nacionalidad: Irlanda (2008)
Director: Steve McQueen
Guión: Steve McQueen

Sinopsis

Hunger nos sitúa en la Irlanda de Norte de 1981, recogiendo los hechos acontecidos en la Maze Prision como consecuencia de las reivindicaciones de los presos paramilitares republicanos tras la pérdida de los derechos que les daba su status político. Tras cinco años de duros conflictos internos, los presos decidirán iniciar una huelga de hambre encabezada por su líder Bobby Sands. Aclamado debut del director y guionista Steve McQueen, que recibió por esta película la Cámara de Oro del Festival de Cannes a la mejor ópera prima.

Crítica

Steve McQueen dio sus primeros pasos en el mundo del largometraje con esta compleja, dura y controvertida cinta. La película desconcierta desde el principio, por lo que si uno no conoce la historia puede sentirse un poco perdido. La sucinta introducción no contextualiza el desarrollo de los hechos ni favorece la comprensión del mensaje para alguien ajeno al tejido histórico en el que se ambienta. Estamos en Irlanda del Norte, en el año 1981. Desde principios de los 70, y ante la incapacidad del parlamento unionista de Stormont para contener el conflicto armado entre los grupos paramilitares republicanos (católicos y nacionalistas, el IRA, en sus dos facciones, la oficial y la provisional, y el INLA) y lealistas (protestantes y leales a la Corona Británica, el UVF y la nueva UDA), el gobierno británico decide suspender la autonomía del parlamento norirlandés y hacerse cargo de la situación. A fin de restar importancia a estos movimientos paramilitares y mermar su trascendencia y apoyo social, una de las medidas tomadas en 1976 fue eliminar el estatus político de sus presos, siendo desde ese momento juzgados en los tribunales Diplock courts, cuyo objetivo era asimilar los delitos paramilitares a los crímenes comunes. Las mayores reivindicaciones vinieron desde el bando republicano, pues contaban con mayor número de presos, iniciando dos protestas carcelarias. La denominada Blanket protest consistía en negarse a vestir el uniforme ordinario de prisiones, prefiriendo cubrir su cuerpo desnudo únicamente con una manta. Mediante la Dirty protest se opusieron a limpiar sus celdas de excrementos y orines y a mantener su propia higiene, poniendo en riesgo la salubridad de sus pabellones carcelarios y su propia integridad física. Todo esto culminó en una fallida huelga de hambre en 1980. En 1981, también en la Maze Prison y encabezada por Bobby Sands, tendría lugar una segunda huelga de hambre con mayores repercusiones, momento éste en el que McQueen nos sitúa.

domingo, 5 de enero de 2014

LA BICICLETA VERDE (Wadja)

Nacionalidad: Arabia Saudí (2012)
Directora: Haifaa Al-Mansour
Guión: Haifaa Al-Mansour

Sinopsis

Wadja es una niña de diez años que juega a competir corriendo con su amigo Abdullah. Cuando a Abduallah le compran una bicicleta la competición queda totalmente desigualada, siendo a partir de este momento cuando surge el anhelo de Wadja por conseguir una. Ante la negativa de sus padres, que consideran que una bicicleta para una chica va en contra del decoro social, Wadja buscará otras formas de obtener el dinero. Su inteligencia y desparpajo le ayudará en esta empresa, aunque también chocará con la restrictiva moral tradicionalista.

Crítica

La bicicleta verde, Wadja en su título original, es la primera película oficial de Arabia Saudí dirigida por una mujer. Me gustaría destacar de la película la inteligencia que muestra la directora en la forma de acercarnos a la realidad social de su país de origen. Haifaa Al-Mansour nos pone en la piel de una niña que no entiende ni juzga las restricciones sociales hacia las mujeres sino más allá de lo que a ella le afecta en ese momento. Sin embargo, su aparentemente anecdótica historia sirve para mostrar retazos de la represión moral y social a la que se ven sometidas las mujeres como consecuencia de un arraigado tradicionalismo religioso y cultural. Wadja conecta rápidamente con el espectador, encontrando en la empatía su mejor aliado y un hilo conductor que hace que la película no se caiga en ningún momento. Es a través de ella que asistimos veladamente a la restrictiva educación islámica que sufren las niñas saudíes; al papel familiar de las mujeres, que no es otro que mantener el hogar, mostrarse atractivas a sus maridos y darles un hijo varón; o al ostracismo público al que se ven sometidas, con una total ausencia de libertades como es el hecho de tener que ocultar su cuerpo y rostro en todo momento, no poder dirigir la palabra a los hombres o no poder conducir, algo esto que las obliga a depender de conductores que abusan de su posición.



Esta temática ya la encontrábamos en otras cintas, como es el caso de Osama, de Siddiq Barmak (2003), en la que, también con una niña como protagonista, se abordaba la dureza del régimen talibán afgano hacia las mujeres. No obstante, Haifaa Al-Mansour elige una forma más sutil y agradable de acercarnos a la realidad de su país. Wadja consigue cautivarnos con su simpatía y su desparpajo, convirtiéndonos en cómplices de su propósito. Sin embargo, la tibieza y naturalidad con que se muestran todos los aspectos comentados no les resta contenido dramático, pues va dejando en el espectador un poso reflexivo que se mantiene incluso después de su visionado.

Haifaa Al-Mansour
Esta película le ha supuesto a la directora recibir numerosos mensajes saudíes de crítica y odio por su irreligiosidad y falta de respeto hacia los valores tradicionales, pero también palabras de apoyo de numerosos sectores por abrir las puertas al debate sobre aspectos considerados hasta entonces preceptivos y tabús. Es esta valentía detentada por Haifaa Al-Mansour, en su voluntad de llevar la realidad social de las mujeres de su país más allá de los límites de sus fronteras, lo que da mayor valor a esta cinta y la convierte en un esperanzador alegato en pos de las libertades.


Valoración personal: 7